Sobre la herida el alma es transparente. Hay una idea simple para explicarlo; la superficie y el interior van deshojándose hasta que la densidad en ambos desploma su imagen.
Escurre el perfume de la muerte en el vació de esta espera, cada límite rompe e instaura un nuevo orden, el de la ceguera. Cabalga sobre el frío el pánico del orbe, ya nada tiene pesadumbre, todo esta hecho de fantasmas.
(POEMA COLECTIVO: Germán Laris y Herza Du Valca).
viernes, 7 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario